Los últimos años nos obligaron a reinventar todo lo que conocíamos, a replantearnos la forma en la que interactuamos, la manera en la que los niños descubren el mundo y, por supuesto, la forma en la que día a día vivimos nuestra jornada de trabajo.

Fue entonces cuando empezamos a comprender que todo podía seguir existiendo gracias a la tecnología, desde la vigilancia y la seguridad, hasta la educación más básica; y poco a poco los modelos que antes parecían utópicos y tomados de gigantescas compañías, también podrían hacer parte de nuestra cotidianidad.

El coworking, el trabajo híbrido, las oficinas multifuncionales y los espacios laborales pensados en función del bienestar de los colaboradores tomaron aún más fuerza, y esta reinvención ha sido la clave para motivar al sector empresarial a vivir una transformación. Los precursores de estos nuevos modelos vieron algo que parecía olvidado y es que el trabajo cada vez es más humano y todo se resume en que el bienestar de los colaboradores es sinónimo de éxito en una compañía, producto de la ecuación eficiencia + motivación. Hoy en día, una vida laboral promedio de 45 años, bajo tareas repetitivas y en un mismo espacio, ya no es una alternativa.

De acuerdo con el más reciente informe de tendencias laborales emitido por Microsoft, el 73% de los colaboradores manifiestan necesitar una mayor motivación para asistir de forma presencial al trabajo, y es que esto, entre otros motivos, puede deberse a que las oficinas se han convertido en el espacio para realizar llamadas y responder mails

¿Qué pasaría si en lugar de ocupar cubículos colmena y coordinar extensas reuniones poco productivas, los equipos pudieran contar con entornos digitalizados de trabajo conjunto, provisto con cámaras 360°, micrófonos, pantallas interactivas y realidad virtual, para llevar a cabo proyectos transversales y tareas colaborativas? La respuesta es algo más que intuitiva, la productividad estaría en alza.

Además de mejorar la eficiencia de los equipos, reducir la tasa de rotación en las empresas es otra de las tareas a cargo de la tecnología. El acceso a la información se ha convertido en una pieza esencial, desde las redes sociales, hasta una compleja labor médica. Por esto, disponer de sistemas integrales de flujo de datos o software de gestión documental, permitiría optimizar tareas dispendiosas, lo cual se traduce en menor tiempo y mayor bienestar al ahorrar hasta 98 horas de trabajo.

La conversación está abierta, las compañías y sus tomadores de decisiones son cada vez más receptivos acerca de los nuevos métodos para mejorar el rendimiento de sus negocios a través del bienestar de sus colaboradores, generando confianza, interconexión y empatía, entonces ¿Por qué continuar con el modelo de trabajo tradicional, si podemos migrar a la oficina del futuro? basta con identificar las necesidades de su compañía e implementar una solución que se adapte para maximizar los resultados y hacer parte de los grandes del mercado actual.